Jack regresó de su aventura cansado y sin ganas de dar
explicaciones.
Al día siguiente le despertó el suave olor del caldo que su
madre estaba preparando con la gallina que trajo consigo la noche anterior.
Comunicación, a esta familia le faltaba comunicación… y más
habichuelas.
8 comentarios:
Les falta de todo...Pero con el estómago vacío es muy difícil pensar.
Besos desde el aire
No me lo puedo creer, que la gallina de los huevos de oro esté en el puchero. Espero que por lo menos de un buen caldo. Lo de "a esta familia le falta comunicación" me ha encantado. Un saludo tempranero.
Ese caldo seguro que será una delicattessen.
A ver; si las relaciones familiares no eran buenas, ¿para qué vuelve a casa?
les falta de tanto que ni palabras tenían...
Curiosote el micro.
Un abrazo!
Supongo que un "¡Mamá, que me dejes que mañana te lo cuento!" no era suficiente.
Gracias por comentar.
Desde luego el caldo seguro que estaba de categoría.
Besitos
Quizás, ya con el estómago lleno y calentito, con el aroma de la sopa en las narices, empiecen a hablar aunque... casi que no, que se duerman y tan a gusto, es mejor que no haya confesiones, fiate de la madre de Jack, yo la veo un mal genio...
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